27 Capitulo 17 - Destruccion de la Babilonia religiosa
La interpretación de los Capítulos 17 y 18 es por demás difícil y los expositores bíblicos no se han puesto de acuerdo en cuanto a muchos detalles de su interpretación. El Capítulo 17 trata acerca de Babilonia como una entidad religiosa o espiritual, mientras que el Capítulo 18 trata acerca de Babilonia como una entidad política.
La gran ramera
Apocalipsis 17:1–2 (RVR60) Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas; 2con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.
Como lo veremos más adelante, el texto bíblico mismo afirma que las muchas aguas representan las muchas naciones que estarán bajo el gobierno de Babilonia. Esta falsa iglesia entrará en alianza con los poderes políticos del mundo, por lo cual se dice que con ella han fornicado los reyes de la tierra. Como resultado de esta alianza, los moradores de la tierra se adherirán al sistema y entrarán a participar de sus falsas doctrinas y prácticas abominables, por lo cual se dice que se han embriagado con el vino de su fornicación.
De tal manera que la gran ramera simboliza el adulterio espiritual de aquel sistema religioso ecuménico que imperará durante la primera parte del Tribulación y que aunque de forma externa dice servir al Dios verdadero, en realidad es todo lo contrario. El Antiguo Testamento menciona frecuentemente el adulterio espiritual por parte de Israel para con su esposo, Jehová (Eze. 16; 23; Oseas).
Apocalipsis 17:3–4 (RVR60) Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos. 4Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación…
Esta bestia escarlata es la misma que aparece en Apocalipsis 13:1, en donde la bestia representa el imperio romano revivido y el epicentro del poder gubernamental en esos días.
Apocalipsis 13:1 (RVR60) Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.
El hecho de que la mujer está sentada sobre la bestia escarlata indica que ella representa un poder distinto al poder político, el cual es la bestia misma. Ese poder es el poder eclesiástico. Por un lado, ella está sostenida por el poder político de la bestia y por otro, ella ocupa un lugar dominante desde el cual influye y dirige a la bestia.
Más adelante en este capítulo se declara el significado de las siete cabezas y diez cuernos, como formas de gobierno que vendrán sucesivamente y como reyes que habrán de gobernar simultáneamente en ese tiempo.
La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, lo cual es propio de la pompa y el brillo que acompañan a los oficiales religiosos de sistemas como el de las iglesias católica romana y ortodoxa griega.
Babilonia: Fuente de mentira y maldad
Apocalipsis 17:5 (RVR60) …Y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.
Muchos investigadores han mencionado el hecho de que los ritos paganos de la antigua Babilonia se infiltraron en la Iglesia durante los primeros siglos de su historia y resultaron en la corrupción que pasó a formar parte del catolicismo romano, del cual el cristianismo protestante se apartó en la Edad Media.
El tema de Babilonia es uno de los más prominentes en las Escrituras, comenzando en Génesis 10, en donde se menciona la ciudad de Babel. A partir de allí hay una serie de referencias bíblicas, de las cuales se hace evidente que en las Escrituras, Babilonia es el nombre de un gran sistema de error y engaño religioso. En efecto, Babilonia es un sistema religioso falso que se convirtió en una plaga para Israel en el Antiguo Testamento, así como para la Iglesia en el Nuevo Testamento. Después de la era apostólica, este sistema ejerció una gran influencia que desvió la Iglesia de la verdad bíblica a la confusión de la apostasía.
En Génesis 10 y 11 se nos dice que Nimrod fue el fundador de Babel, más tarde llamada Babilonia. Allí ocurrió la rebelión de los hombres contra Dios, cuando intentaron construir una torre que llegara hasta el cielo – la famosa torre de Babel. Fue, entonces, cuando Dios confundió el lenguaje de los hombres y llamó a la ciudad, Babel, que quiere decir “confusión” (Gén. 11:1-9).
Babilonia alcanzó gran renombre bajo el liderazgo de Hamurabi (1728-1686 a.C.), en lo que se conoce como el antiguo imperio babilónico. Pero la mayor gloria de Babilonia la alcanzó Nabucodonosor durante el nuevo imperio babilónico, alrededor de 600 años antes de Cristo. Fue allí en donde el profeta Daniel escribió su libro que forma parte del Antiguo Testamento.
Registros extra-bíblicos indican que Semíramis, la esposa de Nimrod, el fundador de Babilonia, lideró como sacerdotisa el sistema de rituales religiosos secretos de Babilonia. Según dichos registros, ella dio a luz a un hijo llamado Tamuz, quien fue considerado salvador de su pueblo y se constituyó en un falso mesías. De él se dice que una fiera del campo lo mató, pero luego resucitó; esto, obviamente, es una mentira que pretende falsificar la resurrección de Cristo. El culto a Baal, una religión característica de los pueblos cananeos, era otra forma de este mismo sistema de rituales paganos originados en Babilonia. A Baal se le considera como idéntico a Tamuz.
Los sumos sacerdotes del culto babilónico llevaban coronas con la forma de la cabeza de un pez, en honor a Dagón – el dios-pez, en las cuales estaba inscrito el título, “Guardián del puente”, en el que “puente” se refería al puente entre el hombre y Satanás.
Así que, a lo largo de la Historia, Babilonia ha estado relacionada con falsas enseñanzas espirituales y cultos religiosos, por lo cual, en Apocalipsis 17:5, se le denomina, BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.
El misterio de la mujer y de la bestia
Apocalipsis 17:6–7 (RVR60) Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro. 7Y el ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Yo te diré el misterio de la mujer, y de la bestia que la trae, la cual tiene las siete cabezas y los diez cuernos.
La mujer no solamente aparece como el origen del engaño religioso sino también como la que está activamente involucrada en la persecución y ejecución de los santos. Al ver el asombro de Juan, el ángel le declara que él le dará a conocer el misterio de la mujer, y de la bestia que la trae.
Apocalipsis 17:8 (RVR60) La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.
El abismo es el lugar en que será puesto Satanás durante el Milenio, por lo que esta referencia indica que el poder del imperio político del Anticristo es de origen satánico, tal como se afirma en Apocalipsis 13.
Apocalipsis 13:2–4 (RVR60) 2Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad. 3…Y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia, 4y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?
La bestia como gobierno mundial será revivido de lo que un día fue el imperio romano y el hombre que tendrá el poder para gobernar al mundo – el Anticristo – recibirá esa autoridad de parte de Satanás. Aquello que aparentemente dejó de ser en la Historia para nunca más volver, será revivido de forma milagrosa al final de los tiempos.
Las siete cabezas de la bestia
Apocalipsis 17:9–11 (RVR60) Esto, para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre los cuales se sienta la mujer, 10y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve tiempo. 11La bestia que era, y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición.
Según este pasaje, se requiere sabiduría espiritual para comprender lo que aquí se revela. Muchos han relacionado los siete montes con la ciudad de Roma, cuyo núcleo en la antigüedad estaba formado por siete montes: Capitolio, Quirinal, Viminal, Aventino, Palatino, Esquilino y Celio. Por esta razón, este pasaje en Apocalipsis se entiende como una indicación de que el asentamiento del poder eclesiástico durante la Gran Tribulación estará ubicado geográficamente en Roma y no en la ciudad de Babilonia a orillas del Tigris.
Sin embargo, el pasaje dice que las siete cabezas de la bestia simbolizan siete reyes, a quienes se les describe en el versículo 10: Cinco de ellos han caído, uno estaba en existencia en los tiempos de Juan, y el séptimo estaba por venir. Por esta razón, muchos prefieren desasociar a Roma de la interpretación del pasaje y concentrarse en el cumplimiento de la profecía en la ciudad de Babilonia, reconstruida en el mismo lugar de la ciudad antigua.
El séptimo rey es sucedido por un octavo, del cual se dice que es la bestia misma, o sea, el imperio del tiempo de la Gran Tribulación. El imperio romano revivido que entrará en pleno funcionamiento inmediatamente después del Arrebatamiento de la Iglesia está representado por la séptima cabeza. En cambio, la bestia que se describe en el versículo 11 como el octavo, es el imperio mundial que será destruido por Jesucristo en su Segunda Venida. En resumidas cuentas, lo que se describe en los versículos del 8 al 11 es la forma final del poder gentil en el mundo en alianza con la religión apóstata simbolizada por la gran ramera.
Los diez cuernos de la bestia
Apocalipsis 17:12–14 (RVR60) Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia. 13Estos tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a la bestia. 14Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.
A diferencia de las siete cabezas de la bestia, estos diez reyes son reyes que gobernarán de forma simultánea al final de los tiempos. Comparando esto con lo que dice en Apocalipsis 13, tal parece que esta es la forma que tomará el imperio romano en su primara fase, antes de convertirse en el imperio mundial. La autoridad de estos reyes estará sujeta a la bestia y la duración de sus gobiernos será breve – por una hora. Así que estos gobernantes pasajeros forman un período de transición del poder, pues ellos entregarán su poder y su autoridad a la bestia.
El significado de las aguas
Apocalipsis 17:15 (RVR60) Me dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
Las muchas aguas mencionadas al principio del capítulo (v. 1), son ahora mencionadas de nuevo para explicar su significado. Esas aguas simbolizan pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
La destrucción de la gran ramera
Apocalipsis 17:16–17 (RVR60) Y los diez cuernos que viste en la bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la dejarán desolada y desnuda; y devorarán sus carnes, y la quemarán con fuego; 17porque Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar lo que él quiso: ponerse de acuerdo, y dar su reino a la bestia, hasta que se cumplan las palabras de Dios.
Los diez cuernos, o sea, los diez reyes descritos antes, destruyen a la ramera que está sobre la bestia. O sea que aquella iglesia apóstata del comienzo de la Tribulación caerá cuando el Anticristo proceda a abolir toda práctica religiosa y demande ser adorado como Dios, lo cual ocurrirá a la mitad del período de siete años de la Tribulación. Durante los primeros tres años y medio, la iglesia apóstata prosperará y establecerá su poder en el mundo, uniendo a todas las religiones en un movimiento ecuménico sin precedentes. Solamente aquellos que hayan puesto su confianza en Jesucristo como Salvador escaparán de este movimiento de unificación.
Sin embargo, con el comienzo de la segunda mitad de la Tribulación, el Anticristo se proclamará como dictador mundial y como tal, ya no necesitará del apoyo de la iglesia, la cual él reemplazará con el culto a sí mismo. Según Apocalipsis 13:8, todos los hombres adorarán a la bestia, excepto los verdaderos creyentes en Cristo.
Apocalipsis 13:8 (RVR60) Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo.
Todo esto ocurrirá en cumplimiento de lo establecido por Dios – que los reinos del mundo lleguen a estar bajo el dominio de la bestia hasta que se cumplan las palabras de Dios.
Después de la destrucción de Babilonia en su sentido religioso, el Capítulo 18 nos muestra la destrucción de Babilonia como poder político. De eso nos ocuparemos en el siguiente
La gran ramera
Apocalipsis 17:1–2 (RVR60) Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas; 2con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.
Como lo veremos más adelante, el texto bíblico mismo afirma que las muchas aguas representan las muchas naciones que estarán bajo el gobierno de Babilonia. Esta falsa iglesia entrará en alianza con los poderes políticos del mundo, por lo cual se dice que con ella han fornicado los reyes de la tierra. Como resultado de esta alianza, los moradores de la tierra se adherirán al sistema y entrarán a participar de sus falsas doctrinas y prácticas abominables, por lo cual se dice que se han embriagado con el vino de su fornicación.
De tal manera que la gran ramera simboliza el adulterio espiritual de aquel sistema religioso ecuménico que imperará durante la primera parte del Tribulación y que aunque de forma externa dice servir al Dios verdadero, en realidad es todo lo contrario. El Antiguo Testamento menciona frecuentemente el adulterio espiritual por parte de Israel para con su esposo, Jehová (Eze. 16; 23; Oseas).
Apocalipsis 17:3–4 (RVR60) Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos. 4Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación…
Esta bestia escarlata es la misma que aparece en Apocalipsis 13:1, en donde la bestia representa el imperio romano revivido y el epicentro del poder gubernamental en esos días.
Apocalipsis 13:1 (RVR60) Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.
El hecho de que la mujer está sentada sobre la bestia escarlata indica que ella representa un poder distinto al poder político, el cual es la bestia misma. Ese poder es el poder eclesiástico. Por un lado, ella está sostenida por el poder político de la bestia y por otro, ella ocupa un lugar dominante desde el cual influye y dirige a la bestia.
Más adelante en este capítulo se declara el significado de las siete cabezas y diez cuernos, como formas de gobierno que vendrán sucesivamente y como reyes que habrán de gobernar simultáneamente en ese tiempo.
La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, lo cual es propio de la pompa y el brillo que acompañan a los oficiales religiosos de sistemas como el de las iglesias católica romana y ortodoxa griega.
Babilonia: Fuente de mentira y maldad
Apocalipsis 17:5 (RVR60) …Y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.
Muchos investigadores han mencionado el hecho de que los ritos paganos de la antigua Babilonia se infiltraron en la Iglesia durante los primeros siglos de su historia y resultaron en la corrupción que pasó a formar parte del catolicismo romano, del cual el cristianismo protestante se apartó en la Edad Media.
El tema de Babilonia es uno de los más prominentes en las Escrituras, comenzando en Génesis 10, en donde se menciona la ciudad de Babel. A partir de allí hay una serie de referencias bíblicas, de las cuales se hace evidente que en las Escrituras, Babilonia es el nombre de un gran sistema de error y engaño religioso. En efecto, Babilonia es un sistema religioso falso que se convirtió en una plaga para Israel en el Antiguo Testamento, así como para la Iglesia en el Nuevo Testamento. Después de la era apostólica, este sistema ejerció una gran influencia que desvió la Iglesia de la verdad bíblica a la confusión de la apostasía.
En Génesis 10 y 11 se nos dice que Nimrod fue el fundador de Babel, más tarde llamada Babilonia. Allí ocurrió la rebelión de los hombres contra Dios, cuando intentaron construir una torre que llegara hasta el cielo – la famosa torre de Babel. Fue, entonces, cuando Dios confundió el lenguaje de los hombres y llamó a la ciudad, Babel, que quiere decir “confusión” (Gén. 11:1-9).
Babilonia alcanzó gran renombre bajo el liderazgo de Hamurabi (1728-1686 a.C.), en lo que se conoce como el antiguo imperio babilónico. Pero la mayor gloria de Babilonia la alcanzó Nabucodonosor durante el nuevo imperio babilónico, alrededor de 600 años antes de Cristo. Fue allí en donde el profeta Daniel escribió su libro que forma parte del Antiguo Testamento.
Registros extra-bíblicos indican que Semíramis, la esposa de Nimrod, el fundador de Babilonia, lideró como sacerdotisa el sistema de rituales religiosos secretos de Babilonia. Según dichos registros, ella dio a luz a un hijo llamado Tamuz, quien fue considerado salvador de su pueblo y se constituyó en un falso mesías. De él se dice que una fiera del campo lo mató, pero luego resucitó; esto, obviamente, es una mentira que pretende falsificar la resurrección de Cristo. El culto a Baal, una religión característica de los pueblos cananeos, era otra forma de este mismo sistema de rituales paganos originados en Babilonia. A Baal se le considera como idéntico a Tamuz.
Los sumos sacerdotes del culto babilónico llevaban coronas con la forma de la cabeza de un pez, en honor a Dagón – el dios-pez, en las cuales estaba inscrito el título, “Guardián del puente”, en el que “puente” se refería al puente entre el hombre y Satanás.
Así que, a lo largo de la Historia, Babilonia ha estado relacionada con falsas enseñanzas espirituales y cultos religiosos, por lo cual, en Apocalipsis 17:5, se le denomina, BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.
El misterio de la mujer y de la bestia
Apocalipsis 17:6–7 (RVR60) Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro. 7Y el ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Yo te diré el misterio de la mujer, y de la bestia que la trae, la cual tiene las siete cabezas y los diez cuernos.
La mujer no solamente aparece como el origen del engaño religioso sino también como la que está activamente involucrada en la persecución y ejecución de los santos. Al ver el asombro de Juan, el ángel le declara que él le dará a conocer el misterio de la mujer, y de la bestia que la trae.
Apocalipsis 17:8 (RVR60) La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.
El abismo es el lugar en que será puesto Satanás durante el Milenio, por lo que esta referencia indica que el poder del imperio político del Anticristo es de origen satánico, tal como se afirma en Apocalipsis 13.
Apocalipsis 13:2–4 (RVR60) 2Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad. 3…Y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia, 4y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?
La bestia como gobierno mundial será revivido de lo que un día fue el imperio romano y el hombre que tendrá el poder para gobernar al mundo – el Anticristo – recibirá esa autoridad de parte de Satanás. Aquello que aparentemente dejó de ser en la Historia para nunca más volver, será revivido de forma milagrosa al final de los tiempos.
Las siete cabezas de la bestia
Apocalipsis 17:9–11 (RVR60) Esto, para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre los cuales se sienta la mujer, 10y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve tiempo. 11La bestia que era, y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición.
Según este pasaje, se requiere sabiduría espiritual para comprender lo que aquí se revela. Muchos han relacionado los siete montes con la ciudad de Roma, cuyo núcleo en la antigüedad estaba formado por siete montes: Capitolio, Quirinal, Viminal, Aventino, Palatino, Esquilino y Celio. Por esta razón, este pasaje en Apocalipsis se entiende como una indicación de que el asentamiento del poder eclesiástico durante la Gran Tribulación estará ubicado geográficamente en Roma y no en la ciudad de Babilonia a orillas del Tigris.
Sin embargo, el pasaje dice que las siete cabezas de la bestia simbolizan siete reyes, a quienes se les describe en el versículo 10: Cinco de ellos han caído, uno estaba en existencia en los tiempos de Juan, y el séptimo estaba por venir. Por esta razón, muchos prefieren desasociar a Roma de la interpretación del pasaje y concentrarse en el cumplimiento de la profecía en la ciudad de Babilonia, reconstruida en el mismo lugar de la ciudad antigua.
El séptimo rey es sucedido por un octavo, del cual se dice que es la bestia misma, o sea, el imperio del tiempo de la Gran Tribulación. El imperio romano revivido que entrará en pleno funcionamiento inmediatamente después del Arrebatamiento de la Iglesia está representado por la séptima cabeza. En cambio, la bestia que se describe en el versículo 11 como el octavo, es el imperio mundial que será destruido por Jesucristo en su Segunda Venida. En resumidas cuentas, lo que se describe en los versículos del 8 al 11 es la forma final del poder gentil en el mundo en alianza con la religión apóstata simbolizada por la gran ramera.
Los diez cuernos de la bestia
Apocalipsis 17:12–14 (RVR60) Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia. 13Estos tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a la bestia. 14Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.
A diferencia de las siete cabezas de la bestia, estos diez reyes son reyes que gobernarán de forma simultánea al final de los tiempos. Comparando esto con lo que dice en Apocalipsis 13, tal parece que esta es la forma que tomará el imperio romano en su primara fase, antes de convertirse en el imperio mundial. La autoridad de estos reyes estará sujeta a la bestia y la duración de sus gobiernos será breve – por una hora. Así que estos gobernantes pasajeros forman un período de transición del poder, pues ellos entregarán su poder y su autoridad a la bestia.
El significado de las aguas
Apocalipsis 17:15 (RVR60) Me dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
Las muchas aguas mencionadas al principio del capítulo (v. 1), son ahora mencionadas de nuevo para explicar su significado. Esas aguas simbolizan pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
La destrucción de la gran ramera
Apocalipsis 17:16–17 (RVR60) Y los diez cuernos que viste en la bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la dejarán desolada y desnuda; y devorarán sus carnes, y la quemarán con fuego; 17porque Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar lo que él quiso: ponerse de acuerdo, y dar su reino a la bestia, hasta que se cumplan las palabras de Dios.
Los diez cuernos, o sea, los diez reyes descritos antes, destruyen a la ramera que está sobre la bestia. O sea que aquella iglesia apóstata del comienzo de la Tribulación caerá cuando el Anticristo proceda a abolir toda práctica religiosa y demande ser adorado como Dios, lo cual ocurrirá a la mitad del período de siete años de la Tribulación. Durante los primeros tres años y medio, la iglesia apóstata prosperará y establecerá su poder en el mundo, uniendo a todas las religiones en un movimiento ecuménico sin precedentes. Solamente aquellos que hayan puesto su confianza en Jesucristo como Salvador escaparán de este movimiento de unificación.
Sin embargo, con el comienzo de la segunda mitad de la Tribulación, el Anticristo se proclamará como dictador mundial y como tal, ya no necesitará del apoyo de la iglesia, la cual él reemplazará con el culto a sí mismo. Según Apocalipsis 13:8, todos los hombres adorarán a la bestia, excepto los verdaderos creyentes en Cristo.
Apocalipsis 13:8 (RVR60) Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo.
Todo esto ocurrirá en cumplimiento de lo establecido por Dios – que los reinos del mundo lleguen a estar bajo el dominio de la bestia hasta que se cumplan las palabras de Dios.
Después de la destrucción de Babilonia en su sentido religioso, el Capítulo 18 nos muestra la destrucción de Babilonia como poder político. De eso nos ocuparemos en el siguiente